Durante nuestra travesía, además de hacer millas y conocer la costa desde el kayak, hemos podido disfrutar de los encantos de Portugal y de sus ciudades. Oporto ha sido una de ellas y bien merece una visita...
El río Douro nace en la falda sur del Pico Urbión (Soria ) y desciende 897 km hasta la desembocadura en Oporto.
El muelle a ambas orillas tiene mucho encanto pero también es la zona más concurrida así que merece la pena perderse entre sus calles...contemplando sus fachadas, su tranvía, su gente...
Es habitúal ver a chavales que se lanzan al agua desde el puente...
Los Ravelos son barcos tradicionales de Oporto que eran utilizados para llevar las barricas de vino de Oporto desde los viñedos hasta Vila Nova de Gaia ( Frente a Oporto). Hoy en día son utilizados para cruceros turísticos.
Sus fachadas coloridas son realmente fotogénicas...
Atardecer en el río DOURO... Merece la pena alejarse del turismo que se aglutina en la zona del puente y el muelle y pasear hacia la desembocadura... el agua toma un color dorado...
Es desde aquí donde continuaríamos hacia el sur...
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